domingo, 10 de noviembre de 2013

Manuela


No puedo creer que estés a millones años luz de mi, que no puedo abrazarte nunca más y que han pasado 6 años desde tu partida, me siento sola y perdida, y aún hoy sueño contigo, sueño con tu reconfortante abrazo, con tu voz (aunque ya no la recuerdo tan bien), con tu paso lento y tu cabello arreglado, tu maquillaje y esa forma de estar sudando la gota gorda pero bien arreglada, extraño tus "Hombre con una chingada…" y tus abrazos infinitos, extraño como me hacías razonar y lo chiqueada que me tenías, extraño tantas cosas tuyas, y empiezo a olvidar otras tantas que cuando las recuerdo se vuelven un tesoro preciado para mi, añoro esos días donde todo parecía estable e inagotable, extraño tu presencia fuerte pero serena, y la comida sin igual que salía de tu cocina, donde estés (qué se que estas bien) quiero que sepas que te extraño, y que te deseo LO MEJOR de esta y todas las vidas que tengas, y ojalá me den la oportunidad de estar de nuevo a tu lado.

Es hermosamente desgarradora la forma en como se dan las cosas, como las personas llegan y se van de tu vida; como te marcan sin pensarlo, sin darse cuenta, es asombroso como la gente que más te marca suele durar muy poco tiempo a tu lado, y es que la vida es así, no podrían darte algo que te corte tan profundo por mucho tiempo, te mataría.

Llegue a tu vida solo para que tiempo después tu abandonaras la mía. Compartimos aire, cama, risas, llantos y espacio, compartí a mis perros contigo a pesar de que a ti te hacían daño, crecí contigo y aún no me hago a la idea de que ya no estas, las idas al café con tus amigas, los cumpleaños de los doctores, de los políticos, las noches en tu casa cuando íbamos al itacate y me regañabas porque pedía muchas tortas (JAJAJAJAJA) pero aún así me las comprabas, el parque (bendito parque), me llevabas a recoger cochinillas en un tubito y así durábamos horas, tu y yo, siempre.

Me alejé de ti, y aún así estábamos TAN cerca, no te veía y aún así tu sabías que me pasaba y como remediarlo, fui muy tonta, pero tu lo dijiste JUSTO una vez más y eliminaste todas mis culpas de una manera eterna, tu dijiste "Hija, yo te entiendo y no tienes que pedirme perdón, pero si es necesario que lo diga te perdono, créeme cuando te digo que tu no debes pedirme perdón por nada que no hubiera hecho yo". 

Gracias, de verdad GRACIAS, por todo y perdón (aunque me digas/dijiste que no era necesario) por cualquier cosa que te lastimara de mi, estaba chica y era egoísta, pero supongo que todos los adolescentes de 15 a 17 años lo somos (lo fuimos), hasta tu, y ahí nuevamente es donde veo tu grandeza, SIEMPRE LO SUPISTE, siempre supiste que fuiste niña, que fuiste adolescente, que fuiste JÓVEN y ahí radicaba una de tus grandezas, esa capacidad de adaptarte, de no satanizar nada, de no admirarte y de comprender. NUNCA recibí una ofensa de tu parte por más pendeja que fuera mi actitud y eso SIEMPRE, SIEMPRE, te lo voy a agradecer, gracias por ser GRANDE de las de verdad, de las innegables, gracias por esos jalones de orejas y esos apapachos, GRACIAS y MIL GRACIAS más por todo, por enseñarme algo que creo que lograste dejar en el corazón de todos los que se acercaron a ti: RESPETO y AMOR, eso SIEMPRE será tu mayor regalo para el mundo.

Tu nieta que te quiere y te extraña.

PD: y el diablito seguía bailando….